Cuando ingresé por primera vez a una escuela, esa era mi principal inquietud, pues antes de iniciar como AT, escuché varias experiencias de compañeros que me decían: "No vas hacer nada, solo estás con el niño, lo que ocurra en el aula no te compete". "Puede ser que algún docente te pida que le tires una mano, porque aparte de tu acompañado, hay otros chicos que tienen NEE". "No, no, pocos docentes elaboran las adecuaciones curriculares, te las tenés que arreglar".
Desde mi función de AT, dejé clara mi lugar: La autoridad en el aula es sólo del docente. En caso de que mi niño necesite adecuaciones, se las exijo al docente o al Maestro Integrador. Esto de "tirar la mano" con otro niño, bueno, en mi caso particular, no tengo problema. Es más, logré en oportunidades que mi acompañado, al compartir la mesa con otro niño que necesitaba orientación, pudiera vincularse e identificar modos más adaptados de relacionarse con sus compañeros desde la ayuda.
Volviendo al tema, los procedimientos de enseñanza, la organización de dinámicas de trabajo, adecuaciones metodológicas deben incluir al niño con NEE. En el caso de TDA/H, cuando es sin hiperactividad, se demoran más en identificarlo, es más silencioso, y por lo general, lo presentan las niñas. Eso dificulta un poco el trabajo, porque cuando es diagnosticado, ya el niño lleva cierto tiempo en la escuela y ha adquirido ciertos hábitos para realizar las tareas que no son los más adecuados. Esto contribuye a que funciones cognitivas como el manejo del tiempo, la organización, la planificación estén vulneradas, y por ende, la autorregulación. Esto se complica más cuando el niño con TDA/H, que por lo general es resistente a la presión, se adapta a ella, y el docente puede llegar a pensar que todo anda bien. Es necesario igual ver el grado de disfuncionalidad ejecutivo y que las adaptaciones incluyan al niño con TDA/H, quien debe recibir propuestas pedagógicas que favorezcan el desarrollo de sus capacidades. El docente de grado y la maestra integradora deben diseñar las propuestas.
Pero en la realidad, ustedes se van a encontrar con dificultades, ya que los maestros integradores no concurren todos los días al establecimiento, o el establecimiento no cuenta con este recurso. También pasa que, en ocasiones, la voluntad de esos profesionales no acompaña las características de cada caso. Es aquí donde es importante que el AT asuma un rol activo para adaptar las actividades en conjunto con el docente encargado del aula. En el caso de secundario, hay varios docentes, allí puede tener en cuenta las materias que más se le dificultan a un niño con TDA/H, quien se presenta con desventaja pedagógica respecto a sus compañeros. Las cuales serían prioridad ser identificadas por el AT. De igual manera, es importante trabajar en el vínculo para poder vislumbrar los intereses del niño. Es así que la función del AT debe orientarse por la apuesta por el sujeto y cómo este se puede servir del espacio que le es habitual esto es lo primordial después el hecho de realizar actividades académicas tiene la función del marco que hará posible el trabajo.